ATÓN FUE PEQUEÑO TAMBIÉN

Lo prometido es deuda, y después de buscar y rebuscar, he seleccionado algunas fotos del otro miembro del equipo Mizifú que os faltaba por conocer. Ya os enseñé la llegada de Isis a casa aquí.

Sí, aunque no lo creáis esta pequeña cosita peluda, es Atón. No me digáis que vosotr@s no os lo hubieseis tenido que quedar :)

Estaba todo el día durmiendo; mirad qué pies de chocolate tiene :)

Era el niño consentido de la casa, y claro, cuando empezó a crecer, en cuanto te descuidabas, hacía con nosotros lo que quería...

Aquí ya empezaba a ser todo un apuesto jovencito ;)

En esta fase llegó el desmadre que luego le acompañaría toda su vida; nos robaba la comida, en cuanto te descuidabas estaba chupando tu plato, etc, etc, etc...

Os puedo contar tantas y tantas anécdotas que no sé ni por donde empezar; recuerdo un día que apareció por el salón corriendo como un loco con una bolsa de sobaos que me había traído mi madre de Santander que pesaba más que él. Y digo yo... a qué gato le gustan los sobaos?? a Atón le encantan; al igual que las magdalenas, las lentejas, las espinacas,.... la verdad, que muy normal no es.

Otro día, cuando llegué a la cocina a hacer la comida, no encontraba por ninguna parte los muslos de pollo que había sacado del congelador la noche anterior. 

Pensé que lo mismo se me iba la olla o algo así... hasta que encontré en el salón el film transparente que los envolvía... y claro, vacío... poco a poco fueron apareciendo huesecillos de pollo por todos los rincones de la casa... ese día, hicimos tratamiento Zen, miramos para otro lado, respiramos hondo, y llamamos al chino para que nos trajeran comida ;)

Tiene un problema con la comida; le gusta TODO. Y se lo sueles acabar dando a probar si no quieres acabar con un tic nervioso en el ojo.

Le adoro; es el niño de mis ojos. Cuanto más travieso es, y más las lía, yo más le quiero. Después de mi descomunal enfado, claro ;)

Yo le digo que es un perri-gato; es sociable a más no poder. Te recibe en la puerta cuando llegas a casa,  te trae los juguetes que le tires (le encanta perseguir los corchos de las botellas de vino), te habla cuando quiere que le hagas caso. 

No tiene miedo a nada ni a nadie. Es el único gato que he tenido, que en lugar de huir del aspirador, le ataca y juega con él.

Con su hermana Isis se porta bastante mal... es la guerra... ese es un problema al que le estoy buscando solución, porque no pienso consentir violencia en el ámbito familiar! ;)

Ahora conocéis un poquito más de nosotros. Aquí os enseñé lo cansados que acaban de tanto trabajar en el taller ;)

Espero que os haya gustado este Kit-Kat a la costura. 

Que tengáis una fantástica semana!!! 

¿Y qué me decís vosotr@s? ¿tenéis peluditos en casa que os las lían en cuanto os descuidáis?